John Dewey (1859-1952) fue un filósofo, psicólogo y pedagogo estadounidense que influyó significativamente en la educación progresista. Nacido en Vermont, Dewey estudió en la Universidad de Vermont y luego obtuvo su doctorado en filosofía en la Universidad Johns Hopkins en 1884.

A lo largo de su carrera, Dewey se interesó por la teoría del conocimiento y la psicología, y creía que la educación debía estar basada en la experiencia y en la resolución de problemas prácticos. Dewey argumentaba que el aprendizaje significativo se produce cuando los estudiantes están activamente involucrados en su propio proceso de aprendizaje y cuando el aprendizaje se relaciona con la vida real y las experiencias cotidianas de los estudiantes.
En su obra «La escuela y la sociedad», Dewey argumenta que la educación debe estar dirigida a preparar a los estudiantes para la vida en una sociedad democrática. Para Dewey, esto significaba enfatizar la importancia del pensamiento crítico y la capacidad de resolver problemas en el aprendizaje, así como promover la cooperación y la participación activa de los estudiantes en la vida escolar.
Dewey también abogó por una educación que estuviera enfocada en la comunidad, donde los estudiantes aprendieran a través de la interacción con su entorno y los demás miembros de la sociedad. En lugar de centrarse en el aprendizaje memorístico de hechos y datos, Dewey creía que la educación debería estar orientada a la solución de problemas prácticos, y que los estudiantes deberían estar involucrados activamente en la toma de decisiones en su propia educación.
La pedagogía progresista, influenciada por Dewey, se caracteriza por la creencia en que la educación debe estar dirigida a desarrollar el pensamiento crítico, la creatividad y la capacidad para resolver problemas en los estudiantes. Los maestros que adoptan esta pedagogía buscan involucrar a los estudiantes activamente en el aprendizaje, y fomentar su participación en la toma de decisiones en el aula.

En resumen, John Dewey fue un filósofo y pedagogo influyente cuyas ideas sobre la educación han tenido un impacto significativo en la pedagogía progresista. Dewey creía que la educación debería estar basada en la experiencia y en la solución de problemas prácticos, y que los estudiantes deberían estar activamente involucrados en su propio proceso de aprendizaje. La pedagogía progresista, inspirada en sus ideas, promueve una educación centrada en el estudiante, donde se fomenta el pensamiento crítico, la creatividad y la participación activa de los estudiantes en la vida escolar.